Hace ya un tiempo que leí esta novela de Saramago
y todavía sonrío al recordar ciertos pasajes. Gracias a la finísima ironía que
envuelve toda la obra y de la que el Premio Nobel es un maestro, hace que su
lectura sea bastante ágil. Se lee relativamente rápido porque te engancha desde
el principio, con una frase que nos adelanta la trama: “No dia seguinte
ninguém morreu” (Al día siguiente no murió nadie). Y es que la muerte,
personificada, deja de “trabajar” en un país sin nombre. A partir de ahí, todo
se complica: de la euforia de la inmortalidad se pasa a la desesperación por
querer morir. Una sátira en toda regla, en la que la muerte y el amor son los
protagonistas de esta original historia.
¿Qué mejor manera de leer a Saramago que en portugués? Entrad en Librarium, id a Obras literarias en idiomas y, finalmente, entrad en Obras literarias en portugués.
Boa leitura!!